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Cuando se está continuamente frente a un videojuego en exposición por largas horas, uno de los síntomas negativos que enseguida se detectan es el de la aparición de molestias en los ojos, acompañado de dolores físicos en los  hombros. Estas pequeñas molestias pueden ir incrementándose llegando a constituír problemas ocultares más difíciles de tratar, como constantes irritaciones o fatiga.

Por lo general estos síntomas comienzan a aparecer ya que no se realiza el parpadeo que lubrica la córnea; en una situacion normal, una persona tiende a parpadear unas 15 veces por minuto, cifra que se reduce de manera importante cuando estamos frente a la pantalla, debido a la atención que le prestamos al juego.

¿Cómo combatir esto? Pues lo ideal es reducir las horas de juego, que en exceso no sólo desembocará en estos problemas físicos sino también psíquicos.
Si juegas moderadamente y notas problemas en tu visión, pues ten en cuenta que la pantalla deberá estar alejado a unos 50 centímetros de distancia, y ésta causará menos daños si es de plasma.