La cara es el espejo del alma, o al menos eso dice el dicho. Y una de las partes de nuestra cara en las que la gente suele fijarse más a menudo es en nuestra boca, y como consecuencia, en nuestros dientes. Pero claro, a veces pasa que con el paso de los años hemos ido perdiendo el blanco y el brillo natural de nuestros dientes por diversos motivos como la comida que consumimos, el café, el tabaco y diversos aspectos de nuestro ámbito de vida diario.

Por eso, si quieres recuperar en gran parte tu blanco y el brillo natural de tus dientes además, la acumulación de sarro propia de los dientes es muy peligrosa para nuestros dientes ya que puede formarse placa bacteriana y dar lugar a la aparición de caries y algunas infecciones más. Es por ello que mantener los dientes limpios y por supuesto blancos es de vital importancia. Por eso hoy daremos unos sencillos consejos para que puedas hacerlo en tu propia casa y eliminar todo el sarro de tus dientes mediante estos trucos que además ayudarán a dejarlos más blancos.

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Para empezar, es necesario recordar que el primero y más efectivos de los trucos para eliminar el sarro y mantener limpios y blancos nuestros dientes es que debemos cepillar nuestros dientes al menos durante 3 veces al día, o después de cada comida, para evitar que los restos de comida queden entre nuestros dientes y nuestras encías, algo que puede dar lugar a la aparición del temido sarro y que como consecuencia puede causar enfermedades dentales además de estropear nuestro color.

También es necesario que utilicemos hilo o seda dental para eliminar los restos de comida que no haya conseguido eliminar nuestro cepillo de dientes ya que hay zonas a las que el cepillo no llega pero el hilo o seda dental sí lo hace. De esta manera eliminaremos mucho más sarro y no dejaremos restos de residuos entre los dientes

Otra forma de acabar con el sarro y de paso blanquear nuestros dientes es utilizando un poco de carbón activo. Debe ser un carbón vegetal hecho a base de madera de coco que podemos encontrar en cualquier tienda de productos naturales. No debemos confundirlo con el carbón hecho a base de petróleo. Una vez que tenemos nuestro carbón, frotamos nuestro cepillo en él suavemente y luego con el cepillo impregnado de carbón cepillamos nuestros dientes durante un par de minutos. Repitiendo esta operación a menudo conseguiremos que nuestros dientes estén mucho más blancos y brillantes.