Flora en peligro: praderas marinas del Mediterráneo. Los mares y océanos están sufriendo intensamente el cambio climático.
Es probable que nos cueste algo más tomar conciencia de este problema ya que no vivimos en el medio acuático. Pero la salud de los mares es nuestra propia salud y tarde o temprano sentiremos las consecuencias en carne propia.
El Mar Mediterráneo cuenta con una hermosa y tupida alfombra verde que cubre 38.000 km2 del fondo marino. Ésta está formada por la planta acuática llamada Posidonia. En ella habitan muchísimas especies que se protegen y se nutren en su verde follaje. Además es un gran oxigenante y funciona como barrera contra la erosión costera. También actúa como indicador del estado de contaminación de las aguas marinas.
Es una planta muy antigua, incluso algunas zonas de la pradera de Posidonia podrían tener hasta 200.000 años de antiguedad. Asimismo se encontró una planta de Posidonea de varios kilómetros de largo, por lo que podría tratarse también del organismo más grande del planeta.
Lo cierto es que este imprescindible elemento del ecosistema del Mar Mediterráneo está en peligro ya que su retroceso es constante. Cada año, las poblaciones de Posidonia se reducen un 5%. Entre los factores que influyen en la destrucción de esta especie se encuentra la presencia de embarcaciones que encallan o circulan sobre ellas y la contaminación química causada por vertido o derrames accidentales o intencionales.
