El azufre, fungicida ecológico . Este elemento es uno de los más antiguos fungicidas conocidos e incluso al día de hoy es utilizado por agricultores en diferentes países.

El azufre es un sólido color amarillo y que además es insoluble al agua. Es conocido desde tiempos remotos, hay registros de que era utilizado por los griegos ya en el año 1000 A.C.

Al ser un producto de bajo nivel tóxico para los humanos y animales, está permitido su uso en los cultivos ecológicos ya que es muy efectivo contra algunos tipos de hongos, como los oídios y ascomicetos, que atacan superficialmente a los cultivos, además es muy eficaz contra los ácaros, algunas especies fitófagas, homópteros y ninfas de trips.

Actúa por contacto directo y también a cierta distancia en algunos parásitos. Se presenta de varias formas, pero las más comunes son en suspensión concentrada y en polvo para pulverización normal. Las dosis variarán entre los 250 a 750 gramos por 100 litros de agua, esto estará supeditado en función de la temperatura de tratamiento, el ciclo de cultivo, etc.

Otra forma de presentación conocida es en polvo micronizado, molido, o sublimado; en este caso las dosis oscilan entre los 20 y 40 kilos por hectárea.

Una mención aparte merece el polisulfuro de calcio soluble en agua que resulta hirviendo lechada de cal viva con azufre. Su uso es exclusivo en tratamientos invernales en frutales y vides.

El uso del azufre como fungicida es óptimo en casi todos los tipos de cultivos ya que en general actúa muy bien en ornamentales, hortícolas, frutales, vid, cereales, etc. Su uso no es recomendado sólo en manzanos, perales y algunas cucurbitáreas.

Algunas precauciones que debemos considerar al momento de usarlo serían: dejar un lapso de tiempo de 21 días antes o después del tratamiento con aceites minerales en las plantas, además no es conveniente que se aplique cuando las temperaturas sobrepasan los 28°.

El ideal para tratamientos en espolvoreo es hacerlo por la mañana temprano, de esa forma aprovechamos el rocío para su mejor adherencia o por la tarde cuando la temperatura ya desciende.

Por último debemos agregar que el azufre es un macroelemento y, por ende, existen preparaciones que podemos utilizar directamente en la tierra como abono y corrector de suelos alcalinos.

Es importante tener en cuenta que este fungicida al ser ecológico no contribuye con el desgaste del suelo ni con el cambio climático como sí lo hacen otros agroquímicos.