En los países industrializados la madera representa el 10% de la basura acumulada, es importante conocer que la madera es completamente reciclable y que su mal manejo luego de utilizada representa un grave foco de contaminación, sobre todo en maderas tratadas con productos químicos.

Una vez separada de los demás restos y recolectada de manera efectiva, la madera recuperada puede ser fácilmente triturada para construir tableros de aglomerado totalmente útiles para la construcción de muebles e interiores, a precios módicos para el consumidor.

La madera de menor tamaño, la viruta y el serrín son útiles a la hora de realizar rellenos de compost, una mezcla de materia orgánica descompuesta que se transforma en una enmienda para el suelo rica en elementos para la tierra.

Inclusive la madera en desuso puede ser recolectada y utilizada como biomasa por ciertos focos industriales para su posterior uso como fuente energética limpia.

Desde el hogar también podemos incorporar conductas reciclables con la madera, renovando muebles dañados con el tiempo para volver a utilizarlos, o usar la madera en la construcción de nuevos elementos, como juguetes, adornos, etc.

Es buena idea además, cuando ya no necesitemos de algún mueble de madera, pensar en algún centro comunitario o comedor que pueda necesitarlo antes de arrojarlo a la basura. Como última medida si la madera no esta tratada o pintada puede usarse como método de calefacción casero quemándola en estufas de leña.