Finaliza el Año Internacional de los Bosques. Vamos a echarle un vistazo al balance del casi caduco 2011, declarado por la Organización de las Naciones Unidas Año Internacional de los Bosques.

El subdirector general de la ONU para la Agricultura y la Alimentación (FAO), Eduardo Rojas, adelanta un saldo positivo a nivel global para este especial año dedicado a los pulmones del planeta.

En Sudamérica la República Dominicana hizo muy bien su tarea, ya que culmina el año con más de ocho millones de árboles plantados por todo su territorio, gracias a iniciativas del Ministerio de Medio Ambiente y del sector privado.

Si bien el balance general a nivel mundial es positivo, lo que se ha criticado son los efectos de la expansión monoforestal comercial. Rojas destaca la importancia que se le ha dado a este Año Internacional de los Bosques para afirmar  «la contribución de los bosques al bienestar de la sociedad, aliviando la pobreza, paliando el cambio climático y contribuyendo a la preservación de la biodiversidad«.

Además destacó lo fundamental de dar importancia a las personas y pequeñas comunidades locales que gestionan los bosques, y que no basta con dedicarle a este tema sólo 12 meses, sino que se debe seguir trabajando de forma incesante.

Si bien algunos países América Latina y el Caribe hicieron grandes esfuerzos, y siendo una región con muchísimos recursos forestales (el 57% de los bosques primarios del mundo), la tasa de deforestación de la zona se mantiene alta.

A pesar de los aparentes buenos resultados en el Año Internacional de los Bosques, el Movimiento Mundial por los Bosques (WRM), realiza una campaña internacional para que la FAO y la ONU, modifiquen la definición de bosque, para eliminar de la misma las plantaciones de monocultivos ya que afectan la biodiversidad y perjudican a los bosques auténticos y a las tierras campesinas.