Una clase de Body Pump transcurre al ritmo de una música dinámica que además de motivar a los alumnos permitirá estructurar el desarrollo de la sesión.
Generalmente, la clase se divide en 10 temas o “tracks” que determinan y/o diagraman el trabajo de las diferentes partes del cuerpo.
Estructura de la sesión de Body Pump:
Primer track: El primer tema sirve se utiliza para realizar la “entrada en calor”. Se trata de la ejecución de una secuencia rápida de una gran parte de los ejercicios que se realizarán a lo largo de la clase, logrando que el cuerpo se prepare para la fase de trabajo que seguirá.
Segundo track: Es el que nos indica que «empieza el trabajo duro»: se trabajan piernas y los glúteos realizando una secuencia de sentadillas con sus variantes.
Tercer track: Trabajo de pectorales.
Cuarto track: Espalda y glúteos.
Quinto track: Tríceps.
Sexto track: Bíceps.
Séptimo track: Se repite con el trabajo de piernas pero con variantes. Ésta vez con genuflexiones o estocadas.
Octavo track: Hombros.
Noveno track: Abdominales.
Décimo track: La sesión acaba dedicando entre 5 y 10 minutos a los estiramientos y a la relajación corporal.
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