La pintora mexicana Frida Kahlo ha llevado un vida poco convencional. Lo cierto que el éxito de su trabajo se vio ensombrecido con todas las desgracias que sufrió a lo largo de su vida. Algo que fue reflejando en sus pinturas, como una manera de plasmar lo que estaba viviendo.

Sin duda, el recuerdo de Frida Kahlo todavía sigue muy vivo. No estamos aquí para hablar de las obras precisamente, pero sí que haremos un repaso por todos esos momentos desgraciados de su vida. Momentos inolvidables que la marcaron para siempre y como no, a todos sus seguidores.

Frida Kahlo contrajo la Poliomielitis

Frida Kahlo joven

Uno de los primeros y peores momentos en su vida fue cuando contrajo la enfermedad Poliomielitis. Porque ya marcaría para siempre su vida y su aspecto. Una enfermedad que es de tipo infeccioso y que afectará al sistema nervioso. Suele darse en niños, pero a partir de ahí dejará unas graves secuelas.

Debido a la enfermedad, Frida tuvo que estar unos 9 meses en casa y como decimos, le dejó una secuela de por vida. Su pierna derecha era mucho más delgada que la izquierda. Esto generó que en el colegio sufriera las burlas por parte de algunos de sus compañeros y que la marcaron para siempre.