En ocasiones, las personas suelen asustarse y perder la calma cuando hay un terremoto, sin embargo, pueden evitar estos momentos de desesperación si aprenden ciertos conocimientos.
El terremoto no es más que un fenómeno de sacudida brusca y pasajera de la corteza terrestre, el cual se produce por la liberación de energía acumulada en forma de ondas sísmicas. En este sentido, los más habituales se llevan a cabo por la actividad de fallas geológicas. Aunque esto no es una regla, porque también pueden suceder por otras causas, tales como: fricción en el borde de placas tectónicas, procesos volcánicos, impactos de asteroides o cualquier objeto celeste de gran tamaño.
Inclusive, algunos son generados por culpa de los seres humanos a través de las detonaciones nucleares subterráneas que llevan a cabo. Cabe recordar que el punto de origen de un terremoto es conocido como foco o hipocentro, por lo que no deben confundirlo con el epicentro. Éste es el lugar de la superficie terrestre que se encuentra directamente encima del hipocentro.
1El terremoto, sus causas y maneras de medirlos
Algunos, dependiendo de su magnitud, pueden causar desplazamientos de la corteza terrestre, corrimientos de tierras, tsunamis o actividades volcánicas. Es por ello, que los seres humanos tuvieron que ingeniárselas para medir la energía que fue liberada por un terremoto. La más conocida y confiable hasta ahora es la escala de Richter, cuyo creador se llamaba Charles Francis Richter, un sismólogo norteamericano.
La función principal de este invento radica en una escala logarítmica arbitraria que arroja un número para cuantificar la energía que liberó un terremoto. Además, es la que más utilizan los medios de comunicación de los cinco continentes. Sus estudios se basan en zonas en las que la concentración de fuerzas generadas por los límites de las placas tectónicas da lugar a movimientos de reajuste en el interior y en la superficie de la Tierra.
Estos, normalmente, están ligados directamente a las actividades de fallas geológicas, las cuales deforman el interior de la Tierra, para después liberar repentina y, a veces, constantemente sus energías acumuladas. Además, estos movimientos sísmicos se propagan alrededor de la tierra a través de las ondas elásticas.
La historia ha presenciado 3 movimientos de tierra que, sin lugar a dudas, han causado grandes desastres en diversos países. Tales como: el terremoto de Valdivia, Chile en 1960 que tuvo una magnitud de 9.5; el terremoto de Alaska de 1964 con 9.2; y el terremoto del océano Índico, Indonesia, que ocurrió 2004 y tuvo un 9.1 en la escala de Richter.
Tras haber adentrado un poco sobre las causas y daños ocasionados por un terremoto, te mostraremos una lista de consejos para sobrevivir a estos movimientos sísmicos.
