Son ricos, son famosos, triunfan en su trabajo, pero se encuentran con una piedra en el camino a la hora de ir a eventos. A muchos famosos, por diversas causas, los diseñadores no los quieren vestir. No quieren que lleven sus prendas, prefieren no tenerlos en sus listas de clientes.

Y cada vez pasa más a menudo, es curioso, pero es así. Famosos que a la hora de vestirse tienen problemas y marcas que no los ayudan, no los apoyan. Hoy vamos a repasar algunos de estos famosos que tienen en su día a día un verdadero hándicap a la hora de elegir modelito.






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La exuberante Christina Hendricks, fue elegida por la revista Enquirer como la mujer más sexy, y es una de las chicas más seguidas de la serie «Mad Men», asegura que se siente discriminada por los grandes diseñadores de moda al ser una mujer con curvas.

Hendricks asegura que nunca le resulta fácil encontrar un diseñador del que llevar sus vestidos en las numerosas galas y celebraciones a la que es invitada. Cuenta que para las alfombras rojas sólo le llegan vestidos en la talla 34 o 36, no le están bien y los tiene que dejar de lado o modificarlos.

Así que si, ha tenido malas experiencias con los diseñadores y las alfombras rojas. Hace unos años, la actriz contó en la revista a Glamour que se sentía frustrada: «Todo se vuelve difícil cuando llega la temporada de premios, necesito encontrar un vestido y solo hay disponible de la talla cero a la talla dos. Entonces es especialmente molesto ver a todos estos diseñadores diciéndote: ‘Nos encanta Mad Men, nos encantas, pero no te haremos un vestido».