Gran Hermano: 13 -1. Aris, ese concursante que pagó 69.100 euros, para entrar en la casa de Gran Hermano mediante una puja, ha sido expulsado tan sólo una semana después de entrar en la casa. Y es que, en tiempos de crisis, a la audiencia le ha sentado muy mal que alguien derroche el dinero y se hipoteque para participar en un programa de televisión.

Aunque la expulsión también podría ser debida a los conflictos que ha tenido con otro de sus compañeros, Pepe. Discutió con el bailaor, a causa de su trato hacia Torso, la mascota del reality. Aris ha acusado al bailaor de maltratador. Y como siempre la magnífica, Mercedes Milá le ha recriminado en la entrevista de plató su actitud frívola ante el maltrato. Y es que acusar a alguien de maltratador es muy grave, más si la actuación de Pepe no fue intencionada, según la periodista.

Milá ha argumentado que uno de los motivos por los que Aris ha tenido que abandonar la casa es que cree qué:

«Estás fuera por decir que nunca habías visto ‘GH’ porque tenías mejores cosas que hacer.”

A lo que el expulsado ha respondido:

“¡Tú estas mal de la pelota! Yo entré porque era la oportunidad de entrar a ‘GH’ y donar el dinero y, aunque no me creas, nunca he visto ‘GH'»

Las consecuencias que deja la expulsión de Aris dentro de la casa son magnánimas. El joven acudió, cuando todavía estaba dentro de la casa, a “la boca de los deseos”, donde accedió al siguiente acuerdo: si no era expulsado por la audiencia esa semana, sería inmune para las nominaciones de la siguiente. El acuerdo no se ha llevado a cabo y la represalia del programa es que durante 24 horas los concursantes no podrán utilizar ninguna parte de la cocina. Así que hasta esta noche van a estar en ayunas. ¿Qué reacciones conllevará esta medida?