Es un problema al que nos enfrentamos todo el año, pero sobre todo en verano: nos encanta nuestro perfume, porque nos identificamos con él, pero no conseguimos que dure lo suficiente. Luego maldecimos por haber comprado ese perfume de marca tan caro, porque no le estamos sacando partido. Bueno, esto tiene arreglo, así que estos pequeños consejos te ayudarán.

En primer lugar, hay que darse cuenta de que existen cierto sitios estratégicos en los que el perfume dura más tiempo. ¿O es que crees que el gesto que ves en todas las películas de ponerse el perfume detrás de las orejas no tiene fundamento? Pues efectivamente, sí lo tiene: detrás de las orejas, muñecas, cuello, tobillos y detrás de las rodillas. Estos sitios son clave y si rociamos con perfume esta parte, durará mucho más.

Por supuesto, si utilizamos una crema corporal que vaya a juego, como las que venden en packs de ofertas, hará que la fragancia pueda durarnos durante todo el día, porque nuestra piel estará totalmente humectada, y por tanto, el olor nos hará destacar más de unas pocas horas, que es lo que suele durar si solo aplicamos el perfume.

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La elección del perfume o la colonia es importante. Debes sentirte cómoda con ella, pero también intenta que sea fuerte, porque evidentemente, las fragancias más delicadas y suaves son las que suelen durar menos.

Y puedes aplicarlo también a tu ropa. Algunas marcas, como Abercrombie, o Hollister, suelen vender, además de la colonia, el body mist (fragancia para el cuerpo), y también el spray para la ropa. Combinando estos tres es imposible que el olor se vaya nunca, eso desde luego.  Y si desaparece, bueno, al menos lo has intentado. En este caso, un truco es aplicarlo durante el planchado, porque el olor se quedará totalmente impregnado.