Seguro que a todos nos gustaría contar con habitaciones mucho más grandes y amplias. Claro que no siempre es posible y en ocasiones, nos vemos obligados a contar con habitaciones mucho más reducidas. Aunque también existen los trucos para ellas y hoy, te los vamos a contar.
Si tienes una habitación pequeña, tienes que saber que son varias las maneras que tenemos de ampliarlas visualmente. Aunque no te lo creas, los mejores trucos estarán a la vista y harán que cada rincón de tu hogar se vea mucho más grande. ¿No te lo crees?, pues tan solo tienes que descubrirlo aquí.
Colores claros
Uno de los motivos principales a la hora de decorar una habitación, es optar por los colores claros. Sin duda, entre todos ellos, el blanco siempre será el mejor protagonista. Gracias a su luz, nos dejará un aire mucho más luminoso y como no, más amplio.
No importa si hablamos de dormitorios o de salones, todas las habitaciones que queramos ver un poco más grandes, necesitan de este color. Además, no tengas miedo a usarlo. Puedes crear una atmósfera denominada total white y con ella, una decoración de tendencia.
Claro que a muchas personas, un entorno completamente blanco le resulta un poco aburrido. Pues bien, no hay ningún tipo de problema porque también ésto tendrá solución. Lo mejor es que te dejes llevar por añadir alguna pincelada en tonos brillantes y vibrantes.
Suelos de color
Si bien las paredes son fundamentales, al igual que los techos de los que luego hablaremos, el suelo no se queda atrás. También él es protagonista para poder darle a una habitación pequeña todo lo que necesita para verse un poco más grande.
Queremos y necesitamos suelos de color. Si añadimos algún color en esta zona, hará que visualmente la habitación se vea más grande. Es decir, añadiremos un poco más de amplitud al entorno sin tener que hacer ningún tipo de obra y en cuestión de minutos.
Además de parece más ancha, la habitación también dará la sensación de que es más alta. Sí, aunque parezca magia no lo es tanto. Simplemente se basa en poder combinar los colores de una manera práctica y perfecta para poder darle este equilibrio al entorno.
Suelo y techo
Si ahora acabamos de mencionar el suelo como uno de los protagonistas, ahora no llega solo. Viene combinado con el techo. Es decir, para agrandar visualmente una habitación pequeña, tenemos que pintar en color tanto el techo como el suelo.
Además, en este caso, necesitamos que sea un color un poco intenso. Dejaremos atrás los colores blancos o neutros que no dan ese contraste tan acusado que necesitamos en este caso. Con esta combinación, haremos que la habitación se vea amplia.
Pero eso sí, también hay que decir que se verá un poco más baja. Así que, solamente está recomendada para esas habitaciones pequeñas que cuentan con techos altos. Porque de lo contrario, podemos hacer que se vea todavía más bajita de lo que es.
Pared de fondo
La denominada pared de fondo es una de las más importantes a la hora de decorar. Gracias a ella podemos hacer que la habitación pequeña cuente con un nuevo aspecto. Si pintas la pared del fondo con un color intenso, conseguirás que las paredes laterales se vean más amplias.
Aunque no te lo parezca, es un método que funciona a la perfección. Tienes que elegir una tonalidad un poco más fuerte que la que lleven las otras paredes. Así, su función es destacar esta zona. Eso sí, lo amplías pero reduces la profundidad.
Claro que parece que todo no se puede tener. Así que, tienes que pensar muy bien antes de dar el paso de pintar. Si ves que cuentas con gran espacio de fondo pero necesitas amplitud en ambos lados, entonces sí puedes ponerte manos a la obra.
Espacio ordenado
Sin duda, una de las grandes cualidades de toda decoración es mantener siempre el espacio ordenado. Sin duda, el diseño interior nos lo va a agradecer. No necesitamos un montón de muebles que vayan acaparando todas y cada una de las habitaciones.
Tan solo, los básicos. Podemos crear ambientes aprovechando las paredes y siempre, intentado integrar muebles sencillos y delicados. Para las habitaciones pequeñas, tan solo vamos a usar lo imprescindible. Todo aquello que no necesitamos, lo retiramos.
Despejar la casa y organizarla, aunque son pasos fundamentales, nos ofrecen numerosas ventajas. Ya no solo por ver un hogar bien cuidado, sino porque visualmente de nuevo tenemos la opción de ver el ambiente más grande. ¿No te parece?.
